Un gran regalo

Cuando salí de filosofia el viernes por la tarde, no se me ocurrió pensar lo bien que me iba a venir un fin de semana fuera de mi ambiente.
Madrid a supuesto una bocanada de aire fresco a la enturbiada vida que he tenido dos semanas atrás.

Desde el viernes a las nueve horas soy una nueva Diana.
Ahora, mientras estudio mate a la una de la madrugada,me emociono pensando en mis planes a partir de la tercera hora del lunes.
Estoy tranquila, relajada y muy feliz. No quiero saber nada de estress,de depresión y de insomnio,eso,esta olvidado.
El suspenso en este examen no quiero verlo como el Apocalipsis,simplemente voy a verlo como un pequeño fracaso esquivable, por asi decirlo.
Estaba muy equivocada,el esfuerzo siempre recompensa aunque no sea de la forma que uno quiere exactamente.
Esta tarde,de vuelta a casa, con mi maleta y a pie, llevaba dibujada una gran sonrisa. Daba igual que lloviera y que estuviese empapada, porque mi vida es todavia más feliz de lo que imaginaba.

Gracias por el fin de semana, ya habeis cumplido con mi regalo en estas navidades.
Siempre he pensado que los mejores regalos no son los que se pagan con dinero. Los regalos no son los objetos que tu compras, sino el significado que tu le das cuando les regalas.